Las difíciles decisiones de la carrera profesional

¿Cómo afecta a la trayectoria profesional de un directivo tomar una decisión u otra? ¿Cómo se ve un directivo cuándo llega a casa?

Las mujeres y los directivos más jóvenes valoran sobre todo, en sus decisiones, el equilibrio entre la vida personal/familiar y la profesional, mientras los hombres de más edad priorizan la promoción profesional y la opinión de su pareja.

En este estudio "Trayectoria, conciliación y rol de los directivos", se demuestra que no hay una percepción generalizada de que el papel del hombre en la familia esté en crisis; sin embargo, las opiniones varían mucho dependiendo del grupo, determinado por la edad o el sexo: los directivos de mayor edad son los que se adhieren con más frecuencia a esta percepción de "crisis". Si pudieran, los directivos en general dedicarían más tiempo a sus hijos, en especial los hombres más jóvenes. Sin embargo, Las mujeres, sin embargo, se dedicarían más a aspectos extrafamiliares, como la formación y el ocio.

Los encuestados, un 67% hombres y un 33 % mujeres, procedían de todos los sectores de la actividad empresarial. La mitad de la muestra son directores de departamento y una tercera parte, directores generales. El nivel profesional de ellos es jerárquicamente superior al de ellas. La proporción de trabajadores autónomos es mayor entre las mujeres.

El cuestionario base recogía información sobre las decisiones profesionales, las situaciones potencialmente generadoras de conflicto, así como el papel del hombre en la familia, entre otras. Para valorar las respuestas, los autores han empleado un método directo, a partir de las respuestas medias de los encuestados.
En la encuesta encontramos diversos perfiles. Entre los directivos, los hombres son, en término medio, mayores, con más experiencia y con nivel jerárquico superior al de las mujeres. El número medio de hijos también es superior en los hombres. Los maridos/compañeros de las mujeres directivas son, la mayor parte de los casos, directivos. El nivel jerárquico de ellos es, de media, superior al de sus cónyuges.

Situaciones de conflicto potencial

Los autores clasifican los resultados en cinco apartados. En primer lugar, los criterios en las decisiones sobre la trayectoria profesional. Las preferencias están más concentradas en las mujeres que en los hombres. En ellas, el criterio dominante es el equilibrio personal/familiar, seguido del reto del nuevo trabajo, mientras que en los hombres, esos dos criterios y la promoción profesional son mayoritarios.

En segundo lugar, entre las situaciones de conflicto potencial consideradas por los encuestados, los autores señalan como la más frecuente la baja por maternidad/paternidad. La reducción de jornada para cuidar de los hijos es la menos frecuente. Por otro lado, el estudio demuestra que las mujeres acceden con más facilidad a la dirección general en las empresas pequeñas que en las grandes.

Todas estas situaciones las viven con mayor frecuencia las mujeres, excepto las ligadas al cuidado de los padres, aunque éstas son tan poco frecuentes que los datos disponibles no permiten extraer conclusiones. En general, entre los hombres que han tenido que hacerse cargo de un familiar dependiente, predominan los que consideran que esa situación ha influido positivamente en su trayectoria. En el caso de las mujeres, sin embargo, predominan las que consideran que esta situación ha influido negativamente su trayectoria profesional.

En el tercer apartado, dedicado a los apoyos en el cuidado de personas dependientes, destaca la opinión de los hombres, para los cuales el apoyo principal es la pareja, mientras que para las mujeres es el servicio doméstico.

Redefinir el papel del hombre en la familia

Las diferencias entre las respuestas de hombres y mujeres son mayores cuando se hace una valoración crítica del papel del hombre en la familia. Las respuestas de los hombres a esas preguntas son, en promedio, menos críticas. La edad y el sexo influyen de modo distinto en los resultados obtenidos de la pregunta: "¿Hay que redefinir el papel del hombre en la familia?". En las mujeres, la respuesta afirmativa a esta cuestión aumenta desde un 63 a un 83% conforme crece la edad, mientras que en los hombres esta progresión es mucho menor.

En el último apartado se analizó a qué dedicarían su tiempo libre los directivos. De los resultados se desprende que los hombres superan a las mujeres en las expectativas de uso del tiempo, si lo tuvieran, respecto a las ocupaciones familiares (los hijos y el cónyugue), mientras las mujeres superan a los hombres en las ambiciones de uso de tiempo más extrafamiliares (la formación y el ocio).

Muchos padres de familia con hijos en edad escolar tienen a menudo la sensación de que dedican poco tiempo a su papel como padres porque su profesión les limita el tiempo que pasan con sus hijos. Por tanto, las políticas familiarmente responsables en las empresas son necesarias para apoyar, no sólo a las mujeres que trabajan, sino también a los padres de familia, ayudándoles así a conseguir un mejor equilibrio entre la vida personal y la familiar.