30 años desmontando mitos sobre la empresa familiar

En relación a las empresas familiares existen tópicos como que se trata de PYMES. También se cree que no duran muchos años. O incluso que estas empresas se gestionan de una manera poco profesional y que dirigir la empresa es la única manera de que la familia propietaria participe en el negocio.

Estos son algunos de los mitos que han sido desmentidos por la investigación de la Cátedra de Empresa Familiar del IESE en sus 30 años de trayectoria. Fundada en el curso 1987-1988, fue la primera de Europa en este campo. Actualmente su titular es el profesor Josep Tàpies, quien acaba de publicar un manual de buenas prácticas para las empresas familiares con los conocimientos adquiridos durante estas tres décadas. En el él se reseñan, entre otros, los 5 errores a evitar en una empresa familiar.

Todos estos errores tienen que ver con la gestión, la propiedad y la sucesión de este tipo de empresas, que suponen el 90% del tejido empresarial en España y el 60% en Europa.

Empresa y familia: juntas pero no revueltas

En la empresa familiar conviven familia y empresa, y es esencial saber separar ambas esferas para evitar tensiones y conflictos. “Tratar a la empresa como empresa y a la familia como familia” es la clave, en palabras del profesor Josep Tàpies. Contar con órganos de gobierno, tanto a nivel corporativo como familiar, es imprescindible para definir claramente los límites de cada ámbito.

En sus tres décadas de vida, la cátedra ha puesto de manifiesto la importancia de las relaciones interpersonales entre los miembros de la familia. Poner el bienestar de las personas en el centro de las decisiones es una práctica común en las empresas familiares que contribuye a su longevidad.

La longevidad de las empresas familiares

El abuelo creó la empresa, el hijo la mantuvo y el nieto la llevó a la ruina, dice el adagio popular. Está muy extendida la creencia de que las empresas familiares raramente superan la tercera generación, aunque un estudio realizado por la Cátedra demuestra que este tipo de empresas vive más años que las de propiedad no familiar. Algunas de ellas incluso logran superar el siglo de vida.

Además, esta investigación permitió desmentir otro mito, relacionado con el tamaño de este tipo de compañías: de las empresas españolas con una facturación superior a los 50 millones de euros que se analizaron, más de la mitad eran de propiedad familiar. Es decir, que hay empresas familiares de gran tamaño y, de hecho, son mayoría en la cabecera del tejido económico español.

La importancia de los accionistas responsables y el rol de la mujer

Actualmente, la investigación de la Cátedra se centra “en la sensibilización de las familias propietarias como familias empresarias”, explica el profesor Tàpies en esta entrevista, y hacerles entender que “da más garantías de continuidad un accionista responsable que un directivo que tenga el apellido del fundador”. Ejercer la propiedad de forma responsable significa tener un compromiso emocional y a largo plazo con la familia y con el proyecto empresarial, aunque no se esté involucrado directamente en el gobierno o en la dirección de la empresa familiar.

También en los últimos años se ha puesto el foco en estudiar la evolución del papel de la mujer en la empresa familiar y en su participación en los consejos de administración.

Una intensa labor divulgativa

A lo largo de estos 30 años, la Cátedra ha publicado cerca de 40 artículos académicos, más de 30 artículos de divulgación, más de 65 casos, 35 notas técnicas y 25 libros. Una intensa actividad investigadora por la que ha recibido reconocimientos como el Best Research Paper en la conferencia de la Family Business Network tres ocasiones y el Professor Emeritus Alden G. Lank Research Award, concedido por la Family Business Network, además del Premi Cambra al mejor trabajo de investigación sobre la empresa familiar.

Ademas, la Cátedra realiza una importante labor divulgativa a través del blog del profesor Josep Tàpies y de la web In Family Business.